GIMNASIO DE FÚTBOL SALA FUNCIONA COMO SEDE DEL PSUV

Hugo Hernandez

A los atletas se les exige utilizar zapatos de goma para
no destruir el tabloncillo. Aqui la locura es total

  Definitivamente la Coordinación de Instalaciones Deportivas, dependencia del Ministerio del Deporte en nuestra entidad, debe designar oficialmente al gimnasio “Campeones Mundiales del 97” como sede del Comando Carabobo y no dejar que los cientos de practicantes de este deporte pierdan el tiempo esperando que finalicen los actos proselitistas que desarrollan los dirigentes de la tolda roja en ese recinto que es patrimonio de todos los tachirenses. 

 El abuso es recurrente y ya, en menos de 5 días se han celebrado dos concentraciones en el emblemático coso de Pueblo Nuevo, sin que medie el menor atisbo de vergüenza por el descarado ventajismo con que actúan los funcionarios que tienen bajo su responsabilidad la administración de estas instalaciones deportivas.

Aquí, el manual de procedimiento que tienen que seguir las asociaciones y los atletas para hacer uso de este gimnasio o de, cualquier otra instalación deportiva, queda reducido a la orden que llega desde las altas esferas del gobierno central donde se dan las directrices de la campaña.

No importa que los atletas tachirenses se queden sin entrenar, o que las selecciones estadales interrumpan su preparación. Lo importante para los administradores de estas instalaciones es quedar bien con el funcionario rojo. La consigna que manejan es que el deporte puede esperar.





Lo más frustrante para los dirigentes deportivos es que a ellos se les exigen una serie de requisitos, entre los que se cuentan cartas de solicitud, planes trimestrales, donaciones de productos de limpieza y lo más paradójico, que le den el mejor trato a la zona de juego o tabloncillo. En el acto de juramentación del llamado comando Carabobo se pudo apreciar como cientos de personas brincaban sobre el tabloncillo con cualquier tipo de calzado.



Se trata de que se cumplan los protocolos establecidos y que ningún escenario deportivo debe ser cedido para protagonizar eventos de este tipo. El gimnasio de Fútbol Sala es una instalación que le pertenece a los deportistas tachirenses y no a un funcionario blandengue, cuida puestos, que pone las mil trabas a los atletas y deja que una facción política haga uso indiscriminado de una instalación deportiva que se construyó con el dinero de todos los tachirenses.